Son muchos los modelos de tendederos que podemos encontrar disponibles y también, son muchas las formas de colgar la ropa, pero siempre conviene buscar la más apropiada. Encontramos dos clases grandes de tendederos los de interior y los de exterior; los primeros son los que se emplean mayormente cuando no contamos con patio, balcón o jardín. Los segundos son los tradicionales que pueden improvisarse o instalarse directamente.
Aunque suene extraño, antes de colgar la ropa en el exterior, debemos tener cuidado de no cometer ninguna infracción, algunas legislaciones prohíben colocar tendederos de ciertas medidas en balcones. Si no tienes un tendedero, te recomendamos los plegables, éstos son muy prácticos y cuando no se usan simplemente se pliegan y se guardan; su forma es similar a la de un biombo. También el mercado nos ofrece tendederos para rincones, se cuelgan en el techo a través de un sistema de cuerdas y poleas y solo se baja cuando necesitamos colgar la ropa, y luego se vuelve a subir para que quede alto y no moleste.